Con esta breve publicación queremos mostrar la estabilidad a largo plazo de la técnica que empleamos últimamente para la regeneración tisular guiada.
Corresponde a la parte más importante de la clínica, el garantizar a nuestros pacientes tratamientos confiables y con garantía. Por ello, hacemos seguimiento de nuestros pacientes, verificando que los trabajos que hemos realizado gozan de un buen estado de salud con el paso de los años.
Nos referimos al caso anteriormente publicado en nuestro blog: Regeneración tisular guiada con implante en incisivo lateral. Parte I y Parte II.
Dos años más tarde, vemos que el aspecto de la encía es muy saludable en el incisivo lateral izquierdo (en la parte superior derecha de la imagen). Una zona que hace más de dos años tenía una importante pérdida ósea a causa de una infección en el incisivo.
En las fotografías se muestra la forma de las papilas, tanto por la parte anterior como por la posterior. Observamos ausencia de inflamación del tejido gingival: la encía no se encuentra engrosada ni sangra y se adapta perfectamente al margen de la corona soportada por el implante. No existe periimplantitis y la encía está queratinizada.
Como colofón a esta presentación, podemos decir, que el incisivo central que se encuentra al lado del implante con injerto también ha regenerado su margen gingival externo, si lo comparamos con los artículos Regeneración tisular guiada con implante en incisivo lateral. Parte I y Parte II. De esta manera, no solo hemos impedido que la retracción gingival continuase, sino que hemos ganado tejido, haciendo que el cuello del incisivo central esté menos expuesto, mejorando su supervivencia. Lo cual evidencia que ha sido un tratamiento atraumático.